Un día normal

Para que os hagais una idea os voy a contar, más o menos, como es un día nomral durante el curso de Finés.

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Suena ese bonito despertador que me han regalado mis amigas a las 8:05 de la mañana, me despierto, lo paro, veo que tiempo hace y me vuelvo a dormir. A las 8:15 suena el reloj de pulsera que tengo y me levanto. Me estiro, bostezo y voy a ponerme el desayuno. Y aquí empiezan las opciones.

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Si he sido suficientemente previsora, habrá leche, así que cereales y cola-cao si hay ganas de levantarse hasta el armario. Si por el contrario se me ha olvidado comprar leche, pues pan con queso si lo hay.

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Me lavo, me visto, preparo las cosas y meto prisa a Chara para irnos. Paramos a recoger a Sofía en el 3er piso y vamos a la estación de tren. Cogemos el tren a Helsinki, la parada siguiente, seis minutos y caminamos hasta la uni. Ahí tenemos de 10 a 11:30 clase, a las 11:30 vamos a la cafetería a comer. Es como en los campamentos. Coges tu bandeja, tu copa, cubiertos, pides el segundo plato, agua y pagas, y luego puedes servirte TODO lo que quieras de 1er plato, eligiendo entre ensalada, patatas... Como con otras tres personas del curso, cada día con alguien diferente, dependiendo de con quien estes en la cola.

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A las 12:30 tenemos otra vez clase hasta las 14:00, y luego un descanso de media hora. Esto es más o menos todos los días. A partir de aquí, tres días a la semana tenemos los "small groups" donde en grupos de 8 personas practicamos el finés oral. Y después a lo mejor tenemos alguna vvisita a algún sitio: museos, mercado, viaje en barco...

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Y así, hemos acabado las clases. Después de esto, pues todo depende. Si hay que comprar algo pues se va a comprar porque aquí las tiendas cierran pronto, sobre las 5 o 6 de la tarde. Si no hay que comprar nada, pues o ir a casa a estudiar algo o conectarme a internet, o ir a dar una vuelta con alguien, generalmente con Inés, a ver una tienda de discos (todavía estamos buscando una que vio Inés el año pasado cuando estuvo aquí cinco días; dice que es especializada en rock y heavy, pero no la encontramos, ni siquiera siguiendo a un heavy-gótico que rondaba pòr allí), a comprar un móvil, o a tomar chocolate, porque he descubierto un café, creo que se llama Robert´s Café, donde te sirven un chocolate caliente (bueno, lo llaman así pero es un cola-cao) con nata por encima y chocolate. Está muy bueno, una pena que valga 2,70 € que es más caro que lo que me cuesta la comida en la uni, y tampoco es cuestión.

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Y tarde o temprano, a casa. Una ducha, algo de deberes de finés, cenar y elegir entre ver un rato la tele (es decir la MTV3, porque el resto son en finés y una en francés) o conectarse a internet.

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Y a la cama sobre las 12 o la 1, que al día siguiente hay clase.